martes, 22 de junio de 2010

Costa Rica


Llegué de noche a San José; Geiner (el administrador de la Isla del Coco y el hombre por el que estoy aquí) junto con Jóse, su hermano; me estaban esperando ya hace rato en el aeropuerto. Me dieron un tour nocturno en automóvil por la ciudad, y a primera vista era para mí un lugar olvidado: locales cerrados, calles sin gente, silencioso, algo sucio y encimado; como recién terminada una fiesta. Sinceramente pensé que era la hora, la zona tal vez y en parte tuve razón, pero en parte no. La siguiente zona del recorrido citadino fue una de casinos, prostitutas y autos que se creían en el “Hermanos Rodríguez” (pista de autos de carreras); pero pasadas unas cuadras volvíamos a lo mismo. Al día siguiente al pasear por la ciudad me dí cuenta que gente, locales abiertos y calles transitadas ya había; pero algo que no cabía en mi concepción (y aún me cuesta) es que en San José no existe el típico y maravilloso “centro histórico”. Toda la arquitectura es de la moderna desechable y en verdad no hay algo que date historia, pero eso sí, arte callejera por todos lados (cosa que me gustó). A pesar de todo, como buen lugar nuevo, tiene su encanto; me la he pasado BASTANTE bien acá.


La familia de Geiner (con la que me estoy quedando) es de lo más atenta, cariñosa y linda. De verdad una joya! (como buenos latinoamericanos). Con Raquel (la hermana) he hecho una amistad muy linda y Gein es como un hermano mayor que todo el día molesta, como buena masoquista que soy (gracias a mi padre), me la paso muy bien con él. De hecho nos fuimos los dos unos cuantos días al caribe: a Puerto Viejo y a Cahuita.


Puerto Viejo es un lugar 100% decadente y cochambroso, ‘habanesco’ diría yo, pero con mucha cultura reggae; a pesar de ello (si sí, no soy muy afín a esa cultura) un lugar precioso. Por citar un ejemplo: Gein y yo nos fuimos a caminar por las playas y me metió en el trozo de selva a orilla del mar (para esto aquí sí se respeta lo de “no construir en los primeros 50 mts de playa” por lo que no hay ni casas, ni restaurantes, ni palapas en la orilla del mar: UN VERDADERO LUJO) y me llevó cuesta arriba (como si fueran muchos metros jajaja) a lo alto de un acantilado; justo ahí, justo a estar a nada de llegar, se soltó un tormentón pero ¡DE AQUELLOS! . No se imaginan lo mágico del momento: a los lados, una vegetación que sobresalía a sobre manera por el brillo del agua; de frente un islote en medio del mar que a pesar de lo cercano se veía un poquito borroso por la cantidad de lluvia; debajo de nosotros, un mar picado que trataba de alcanzarnos; y arriba una lluvia torrencial que nos bañaba uff con una felicidad BRUTAL. Yo suelo disfrutar mucho las lluvias, pero esa en aprticular tenía un ‘no se que’ maravilloso.


Cahuita es un parque natural donde está un camino muy cercano al mar que te lleva a lo largo de una selva DENSA. Una selva con muchos monos, de los aulladores y de los silenciosos; grillos gigantes, plantas exóticas, arañas tremendamente elegantes, cangrejos hermitaños cruzándose en el camino todo el tiempo, lagartijas con copete que tienen un toque de dinosaurio, en fin, una caja de sorpresas. Tras 4 km de recorrido llegamos a Punta Vargas, una playa para sólo nosotros donde toda la vista era mar y selva: un manjar para los ojos, si es que eso se puede.

De la parte marina puedo decir que no vi muchos corales, pero los escasos que ví, estaban sanos. Que alegría me dió eso! También en la orilla rocosa del mar sucede algo que nunca había visto y que obviamente, me fascinó: La orilla es de roca y te vas adentrando (digamos que vamos a 2 mts de distancia) y de repente hay un hueco en la roca; si, sí, una alberca de aproximadamente 7x2 mts y 3 de profundidad. Al rededor de ese hoyo de agua sigue la roca normal llegándote el agua a los tobillos; una cosa realmente rarísima. Adentro peces y algo de corales, pero es como la clama en la tempestad: un fondo arenoso y con vida, en una orilla semi-escarpada.

En la ciudad me sucedió hoy algo terriblemente gratificante. Si hay algo que me cuesta mucho trabajo es contar algo con poco detalle, pero en haras de superarme, trataré de resumir. Fuí por segunda ocasión en el viaje a visitar una ONG llamada PRETOMA que trabaja con asuntos de la pesca de tortugas y tiburones. Luchan mucho contra el aleteo (creo que debido a mi gran trauma ya les habré contado a todos ustedes sobre ello, pero por si no, vean este video de sólo 5 minutos http://www.youtube.com/watch?v=PC66ACRpBH8&playnext_from=TL&videos=spbH8mtMdUk ) y bueno, hoy fue como llegar a mi MECA. Mi intención de volver a visitarlos fue que quería comprar una playera (a opinión de mis amigos totalmente amarillista, en mi opinión literalmente sincera y verdadera) pero la cosa salió mucho mejor.
Llegué esta vez sin Geiner pero con Silvia y Miguel (dos amigos de la universidad que llegaron ayer y estarán conmigo), y bueno a mi parecer fuí mejor recibida que la vez pasada (y vaya que habíamos sido bien recibidos).


La primera vez me enseñaron todas las pruebas de anzuelos que habían hecho hasta llegar al efectivo, el cual si jalas una cuerda sacas lo que pescaste, si jalas otra, liberas muy facilmente al animal (en el caso de ser una especie prohibida, vetada o no deseada). Me enseñaron los dispositivos que le ponen a los tiburones para rastrearlos ya sea vía satelital o acústico; atornillan a su aleta un aparato, o en su defecto, le abren, le insertan y dan dos puntadas en el segundo caso. Ambas cosas les han estado funcionando bien para monitorearlos y algo que dijo el de la organización me dió mucho revuelo en la cabeza por la genialidad a pesar de lo trágico “Se ve cómo los tiburones nadan al rededor de la isla, van alejándose y acercándose hasta que de repente se les ve irse en línea recta a Puntarenas” (puntarenas es un puerto, y se refería al momento en que eran pescados). Ese mismo día me regaló dos cds con videos de promoción y me mostró unas fotos y videos. Salí contentísima.

La segunda vez le pedí que les enseñara a mis compañeros el maravilloso anzuelo (que DEBE de ser a mi juicio distribuido mundialmente) y les platicara un poco de lo que a mí. En su tiquense amabilidad también les enseñó fotos y videos; y después de rato de plática acabó regalándome una guía de identificación de tiburones, una revista con artículos del aleteo, un compendio de artículos de tiburones, un póster, 3 calcomanías, un anzuelo de esos maravillosos (para que bajita la mano y agradecería la discreción de los lectores del blog, ayude a que la idea de ese anzuelo llegue a manos de pescadores mexicanos porque claro es un anzuelo patentado) y un bonche de estampas nuevas que hicieron sobe el aleteo para repartir. He de comentarles como nota rápida que en Costa Rica el billete de 2 mil colones tiene en la parte de atrás un tiburón martillo; pues ellos lo que hicieron fue hacer una estampa de un billete idéntico pero con un tiburon sin aleta y dejando rastros de sangre en el agua; una belleza. Por si fuera poco, hace tiempo que quiero conseguir un documental que no he visto y muero por ver llamado THE END OF THE LINE, y el encargado de hacer los videos de promoción de la ONG me dijo que me daría una copia de la película gratis para mi regreso de la isla.

No se si notaron mi amor por los tiburones, mi interés en el tema del aleteo o transmití mis ganas de hacer algo porque me abrieron los brazos. Ojalá pudiera trabajar en una organización así; de entrada, sé que voy por buen camino. Mañana salgo hacia la Isla del Coco, me esperan 36 hrs de barco así que ya luego contaré mi experiencia.


domingo, 6 de junio de 2010

Akumal




Pues si, después de Colorado estuve una semana más en Sisal y luego me vine a Akumal (una playa caribeña cercana a Tulum) de práctica de campo con Rod (el profe), el Macho (un amigo de mi generación) y la Chiva (una amiga de ua generación arriba).

Vinimos 10 días a bucear, ¡al fin llegó el momento esperado durante todo el semestre!... diario nos levantamos a las 7 y poco; desayunamos, nos preparamos y a las 830am estamos en el Dive center preparando el equipo para a las 9am dar la marcha hacia la mar :-D .

En la mañana hacemos 5 inmersiones de 15 minutos cada una aproximadamente en parches diferentes. La idea es hacer una evaluación y una caracterización del arrecife por lo que para ello tiramos un transecto (como una cinta métrica de 50m) sobre la cual hacemos una banda imaginaria de un metro y lo que veamos en ella lo anotamos. Macho es el encargado de ver los peces que hay, la chiva los corales y yo qué enfermedades tienen qué corales; rod graba todo ese transecto en video para luego revisarlos en laboratorio. Luego el papel de la cadena nos la vamos turnando; hay que poner una cadena de 20m sobre la superficie del arrecife, si hay un hoyo tons hasta el fondo si hay una montañita todo sobre ella, para así poder ver que tan compleja está la topografía y luego se mide cuanto quedó.

El punto es que todo empezó NO muy satisfactoriamente pues la chiva y yo invariablemente nos mareábamos terrible y le dabamos nuestra ofrenda diaria al mar desde la borda de la lancha jajaja; después, el Dramamine se convirtió en nuestro mejor amigo.

El fondo del mar akumaleño es medio triste (como casi cualquier fondo del mar) pues el 60% es un cementerio y el resto son corales enfermos pero la verdad ME FASCINÓ todo lo que ví ! Nunca en verdad NUNCA pense que me gustarían tanto los corales, y el hecho de verlos en vivo después de haberlos estudiado en libros es HERMOSÍSIMO.





Por las tardes íbamos como a otros 4 puntos pero ya más pegados a la costa por lo que lo hacíamos con snorkel en vez de tanque y ahí fué donde vimos muchísmas tortugas la mayoría gigantísimas, no miento, como de metro y medio o poco más. Estas estaciones son muchisímo más cansadas porque obvio estan las olas, la corriente, nadar en superficie, etc; pero bien chingonas.

Ayer fue la muerte, nos tocó hacer puras lagunas, es decir puro snorkel y las primeras dos fueron el bahía de akumal (cosa leve) pero las segundas fueron TERRIBLES. Llegamos al arecife y resulta que la distancia de la superficie del arrecife a la superficie del agua era ¡¡de menos de 15 cm!! por lo que nadar encima de eso estaba cabrón. A mí me tocó hacer la cadena, es decir la parte lenta porque hay que irla acomodando poco a poco y LI-TE-RAL-MEN-TE me quedaba horizontalmente en pose de lagartija (sí sí como cuando haces ejercicio) esperando a que llegara la siguiente ola y me impulsara un poco más, cosa también complicada porque tenía que cuidar de no mover la cadena, de estirar la parte que no había puesto y acomodarla en el nuevo cacho de arrecife, de no aplastar los corales vivos y sobre todo cuidarme de que no me aventara contra un erizo ¡¡¡¡porque habia millones !!!!, literalmente moría de pánico pero como dicen "al mal paso darle prisa", mis compñeros también se tardaron como yo pero ellos fué mas rápido porque era el transecto.

Una vez terminado y tomada la medida había que regresar por el mismo camino y recoger la cadena y desatorarla uff maldita cadaena que se atoraba. Para enfatizar el nivel de complicación de este arrecife, para hacer un transecto normalmente tardamos 15 minutos, bueno entre entrar, hacer la cadena y el transecto y salir tardamos 50 minutotes! estuvo BIEEEEN cansado pero la verdad nos sentíamos muy contentos de haberlo logrado. Para el cuarto arrecife también estuvo complicado por la distancia a la superficie pero más que nada por la corriente, nos tardamos menos pero TREMENDO SUSTO porue estuve horas (si si, exagero, probablemente 10 minutos) a mis compañeros y por mas qu volteaba a la playa, al arrecife, al mar, a todos lados no los veía. Pero bueno afortunadamente no se los había tragado el mar ni ninguna historia que pude imaginarme en ese momento, simplemente nos había sacado el mar por lados diferentes y a ellos les había costado más nadar de salida.






Regresamos a hechar el clásico sandwich pa comer y partimos hacia la quinta estación. Fuimos a Bahía Príncipe y todo se veía muy tranquilo, lleno de turistas, unas boyas, cosa linda. Nos dijo Rod que era el peor de todos pero ps pensamos "¿porque? si el arrecife se ve bien cerca!" pues ingenuos nosotros que intentamos llegar a el; a pesar de ser de los más cercanos que habíamos hecho (si no es que el más) la corriente estaba fuertisísima, peor de verdad mal plan. Rod tras harto esfuerzo logró llegar y apenas podía permanecer agarrado de un coral con harta fuerza; el macho llegó y casi luego luego se regresó, y la chiva y yo nadábamos con todo nuestro esfuerzo pero con toda esa fuerza sólo conseguíamos permanecer en el mismo lugar; dejábamos de patalearle duro y la corriente nos llevaba, no no FATALISIMO. Decidimos abortar misión y si de por si ya íbamos dos que tres cansados terminamos ya exhaustos.

Una cosa hermosísima que me pasó mientras discutía con la corriente fué que había abajo de mi ¡una morena bebé ! era la cosa más tierna y hermosa del mundo, de verdad!. Era café con manchas blancas y me veía como analizándome no no awwwww una cosita en verdad excesivamente tierna.

Salimos, regresamos al CEA (Centro Ecológico Akumal) lavamos nuestra camioneta, nos dimos un deliciosísimo baño y cenamos.
Algo que nos dio hartísimo gusto fue que Rod nos dijo que después de haber hecho los arrecifes de ese día (refiriéndose a los de Media Luna, es decir, los de la poca distancia a superficie) ya cualquier trabajo que nos pusieran (obviamente hablando de temas relacionados, no de dentista ni mecánica) se nos haría super papa. Ojalá ! porque la verdad es que estuvo cansadísimo, complicadísimimo, tediosísimo, pero es muy satisfactorio cuando lo terminas, volteas y dices: "¡Wow!,lo logramos".

Hoy amaneció con mucho viento por lo que fue nuestro día libre; al fin tuve tiempo para escribir y sobre todo para descansar.

A pesar de la chinga loca y el cansancio brutal con el que amanecí, me fascina estar aprendiendo, me fascina estar buceando, me fascina que cada vez somos más familia los 4, me fascina conocer nuevos lugares, nueva gente y me fascina lo que el mar me muestra. Estoy contentísima por mi satisfacción con lo que hago, espero las cosas sigan tan bien.






Ya para cerrar el viaje nos fuimos a bucear sin cadena, sin transecto, sin apuntar. Sólo a grabar en el caso de Rodrigo, y en el nuestro a ver. Uff ! Bajamos 100 pies ! Lo que nunca había bajado; fue IN-CRE-I-BLE; había como varios dedos de arrecife o mmm varios parches por decirlo de alguna manera y en ellos: WoW! ¿Que no vi? (bueno, exagero, yo se)

Lo primero que atrapó mi mirada fueron unas esponjas. La primera era como un gran tazón, una gran vasija con un pequeño hoyo como boca, adentro era hueco: IMPRESIONANTE!. La seguna esponja era más pequeña pero mucho más chingona: brillaba morado neon fluorescente, de verdad, literal, como en avatar. No podía creer ver algo así natural ante mis ojos.

Seguí nadando y no podía creer loque veía. ¡Al fin el coral que tanto esperaba! Una gomita !!! Woooow nade para alcanzar a Rodrigo pero en eso mi opción fue gritar para llamar su atención (ya que el traía la cámara de video); venía hacia nosotros una mantaraya águila suuuuuper grande, ¡parecía que volaba! Fue nadando de lo mas calmo frente a nosotros, dio vuelta hacia nuestra derecha, se presumió a sí misma más tiempo y luego se fue. Ufff hermosisísimo.

Seguimos observando a nuestro al rededor y luego Rodrigo fue quien me llamó a mí y me pidió que fuera. Me señaló algo y yo veía un coral con detenimiento tratando de descubrir qué tenía que verle a aquel coral. Me zapeó y me volvió a señalar, super hábilmente no me dí cuenta que junto a mí había un mismísmo y controversial Pez León (aquel que se la vive en las primeras planas debido a su terrible invasión al atlántico); lo que tiene de terrible lo tiene de hermoso. Ma! Que criatura tan bella y elegante con sus espinas largas de las que se desprenden unas como telas cual gimnasta artística. Sus grandes ojos y su suave piel cafe manchada de blanco de verdad que pese a mi ignorancia inicial relucían porque se movían conforme al agua. Bellísima criatura, bellísima. A pesar de haber sido dos inmersiones largas de 100 y 80 pies cada una me duró el tanque ahora sí que hasta la última bocanada de aire; fue simplemente una maravillosa despedida del Caribe.

Colorado: RMSSN Summer Academy








...Pues las clases no terminan pero las aventuras ya comienzan...


Me fui a Colorado poco más de una semana y todo gracias a una confusión, una gran amiga y un toque de destino. Como bien acuñada por mi amiga, 'la frase del viaje' dice: "Las cosas pasan por algo, y tenía que ser así, no de otro modo".

El punto es que Jime (mi amiga de la UADY), Migue (mi compita de la UMDI) otro personaje uady y yo nos fuimos pal otro lado; pero afortunadamente ni en un camión pollero ni nadando el río, nos fuimos con boleto de avión, comida y hospedaje pagado por la Colorado State University (CSU).

Colorado es famoso por su 'Rocky Mountain' por lo que la emoción de llegar a las montañas (más viniendo de la prístina y pura planicie yucateca) era extrema. Ya íbamos algo mentalizados para el frío pues según el reporte meteorológico pasaríamos de los 45ºC del riquísimo mar sisaleño (un poco más para el caso del par Mérida) a los 10ºC como máxima de los fríos pueblos de montaña.

Nos fuimos en aviones diferentes que tenían escalas diferentes y bueno tras apuros, un mounstro de aeropuerto, una hora de retraso, 40 minutos para tomar el siguiente vuelo y una distracción fatal debida a la poca práctica del inglés, Migue y yo perdimos nuestra conexión en Houston. La cosa o no empezaba bien y era un indicio del mal viaje que nos esperaba, o probablemente empezaba con una aventura extrema esperándonos un viagem con bastantes sorpresas. Voté por la segunda opción y afortunadamente así fue.

Como llegamos un día antes de la cita con los de la universidad, nos quedamos en Denver con dos chicos de nuestra edad que contactamos por internet y que vivían cerca de la Universidad de Denver (mal a bien pensando que era la misma a la que íbamos y que estaríamos hospedados cerquísima). Cuando llegamos a su casa nos esperaban con hot dogs, hamburguesas, carnes asadas, hamburguesas y como 5 amigos más. Para nuestra sorpresa o para mi sorpresa los dos de la casa hablaban español y el resto o estaba aprendiendo o medio lo entendía o realmente se esforzaba por hablarlo. Resultó que la mayoría ya había vivido en algún país de latinoamerica y que la movilidad estudiantil es lo más común (muy diferente a la UMDI donde tienes realmente que luchar contra viento y marea para salir por un semestre).

Al día siguiente uno de los de la casa nos hizo el enorme favor de llevarnos a la CSU que estaba ni siquiera al otro lado de la ciudad sino EN OTRO PUEBLO! jajaja. Llegamos y nos encontramos con una parte de nuestros compañeros y la asistente del Doctor con el que íbamos. Partimos hacia el campamento en el que estaríamos y tras caminos y carreteras resultó que era en medio de la estepa, ¡¿y las montañas?! , pues no, en medio de la nada de nuevo.



Eran 3 casas con dormitorios y un salón donde tomaríamos las clases, y como en reality show gringo, corrimos a una mesa de la sala a agarrar nuestros gafetes y correr a elegir cuarto jajaja. Nos reunimos todos y nos presentamos, resultó que éramos como 28 estudiantes, todos del interior de Estados Unidos excepto nosotros 4.

El curso fue para prepararnos para nuestras estancias del verano en nuestras respectivas áreas protegidas, a la red estudiantil se le llamó ROCKY MOUNTAIN SUSTENTABILITY SCIENCE NETWORK de la CSU, lo cuál lo volvía más contradictorio aún por tal nombre y tal lugar; en fin.

El itinerario diario era desayunar en casa, a las 9 am estar en el auditorio para tomar clases, de 1 a 2 pm ir a casa a comer, regresar a tomar más clases e ir a campo; a las 630 o 7pm estaríamos de vuelta para cenar todos juntos y luego 'noche libre' (pero como estábamos en medio de alguna carretera, en medio de una estepa, en medio de la nada, realmente no había muchas opciones).

La experiencia fué increíble, no pude creer que donde sólo ves pasto haya tantas cosas diferentes: vimos 10 tipos diferentes de pasto, conejos, ranas diminutas, horned lizards (que son una mezcla de lagartijas con rana prehistóricas), corplites (caca de dinosaurio fosilizadas) entre más. Y más increíble aún, ya que había muchos estudiantes de 'Wildlife Biology' , ¡podían reconocer a un animal por medio de las heces ! era increíble como discutían hasta que llegaban a un acuerdo de que animal estuvo ahí y hace cuánto tiempo...¡y todo por ver y tocar una caca! fenomenal realmente.

Muchos de los gringos nos dijeron que nos deberíamos sentir muy afortunados porque estábamos viendo muchas cosas que ellos estaban viendo por primera vez en su vida y no fue la excepción cuando todos salieron corriendo del salón gritando porque venía un tornado. Fue hermosísimo, afortunadamente no se acercó para ponernos en peligro pero si lo suficiente para contemplarlo; ¡realmente emocionante!

Tras muchas clases, mucha convivencia en casa y muchas cenas nos convertimos todos en una gran familia, nos empezamos a llevar muy bien y desgraciadamente cuando mejor nos llevamos ya casi era momento de irse.

Un día antes de que terminara todo el curso ¡AL FIN NOS LLEVARON A LAS MONTAÑAS! fue lo más maravilloso, muchísima nieve, un paisaje hermosísimo, y ya 'en familia' mucha confianza por lo que llevó a mucha diversión. Nos hicieron tomar un 'rope course' el cual no fue nada más que regresar a la infancia a uno de los campamentos de viajes de generación: es decir ¡¡¡LO MÁXIMO!!! . Nos aventamos de un tipo bungie-columpio uffff ¡que si grité! yo creo que me escucharon hasta New York jajaja, hubo otro que te subías a un poste (tal cual como los de luz) y te tenías que aventar a un trapecio, otro de caminar por un tronco horizontal en una altura respetable y lego aventarte no uff adrenalina suelta por todas las montañas!

De regreso vimos un alce en el camino y en la noche una fiesta de despedida, si si, sigue habiendo gringos en el mundo que bailan muuuy cómico. Nos quedamos un día más con los chicos que nos recibieron antes y fuimos a una fiesta como de película gringa: comienza con gente semi desnuda caminando por la calle, llegas a la fiesta y hay peleas en alberca de chocolate, miles d ejuegos para beber y termina con todo mundo huyendo por rendijas y brincando bardas porque llegó la policía; realmente un gran viaje.

Lo que más me gustó de todo es haber conocido a gringos "no esteriotipados" es decir, no el clásico pelele que vive en su sistema feliz. Conocí gente culta, gente pensante, gente inteligente, gente de mundo, interesante, con gustos similares, preocupados por más allá que el shopping, muy chingón poder aprender de ellos, poder enseñarles a ellos y poder quitar el estereotipo que tenía de ellos (claro, son minoría).